martes, 24 de noviembre de 2015

Grandullones y pequeñajos

El grandullón, junto a otro trasatlántico grande, grande, está atracado en el muelle de cruceros. En otro muelle, en el Reina Sofía, podemos ver las grandes torres para perforaciones petrolíferas en el mar. Ellos, los grandullones, están a salvo de la marejada, indiferentes, pensamos, a lo que ocurre a su alrededor. Y no debieran estarlo pues lo que ocurre en esta mañana de domingo es algo grandioso, algo sublime, que habla del espíritu aventurero y de sacrificio del hombre y de la mujer; del ser humano. Pues en barcos pequeñajos unos nautas se disponen un año más a realizar la travesía desde nuestra isla a la de Santa Lucía, en el Caribe, surcando durante días y noches el océano Atlántico que nos une y que nos separa. Feliz viaje, les deseamos.

domingo, 22 de noviembre de 2015

El reloj parado

El reloj parado nos dice su hora aunque no nos aclara si esta es la de la mañana o la de la noche; marca un cuarto para las ocho y quienes por la Alameda transitamos sabemos que ello es así desde hace mucho. Por la ciudad han transcurrido los días, las semanas y los meses, también los años, y sin embargo para el reloj sigue sin avanzar un solo segundo el tiempo, que para el es tiempo muerto. Sus manecillas están paradas y tan solo la luz del sol, cuando juega con ellas para hacer sombras chinescas, produce la ilusión de que el reloj anda. Es triste. El buen reloj tiene el tiempo detenido y nosotros pensamos en que quizás nosotros igualmente lo tengamos así.

lunes, 9 de noviembre de 2015

Paneles solares

De un tiempo a esta parte hemos visto florecer en las paradas de guaguas unos postes que tienen en alto una pantalla en la que se anuncia las próximas llegadas de los vehículos. Son postes estilizados, en nuestra opinión bonitos, además de útiles, que sirven para calmar, a veces, la impaciencia de los viajeros urbanos. Más allá de la pantalla en cada cacharro de estos vemos un precioso panel solar por lo que deducimos que la energía necesaria para que funcione proviene en buena medida del sol. Sol que como es sabido es nuestro amigo y compañero durante todo el año.

En nuestra ignorancia de tantas cosas, y desconociendo como desconocemos como funciona el llamado "impuesto al sol" de nuestro flamante ministro de Industria, grancanario de pro, nos preguntamos si estos artilugios han de pagar por proveerse de energía del sol para que revierta en nuestro beneficio, y, en tal caso, a quien corresponde el pagarlo: ¿Al Ayuntamiento? ¿A Guaguas municipales? ¿A los dos?

lunes, 2 de noviembre de 2015

Halloween y finados

Primer domingo de mes, con los comercios abiertos, y mañana de Halloween. Además la Casa Museo de Colón con entrada libre. Todo ello prometía. Así que nos fuimos a la calle Mayor en una mañana en que ni los rigores del sol ni las molestias de la lluvia nos acompañaba. No todas las tiendas abren y solo en algunas vemos cucuruchos para que las brujas se cubran sus cabezas y otras cosas que se suponen dan miedo junto a unas sonrientes calabazas. A mitad de la calle un cartel en un tenderete anima a llevar Recuerdos inolvidables para toda la Familia, en fotografías. Tres simpáticas brujas, de blanco satén, en el suelo, animaban a ello.

Para completar la mañana, en la Casa de Colón pudimos ver un altar a los muertos tal como se hacen en Méjico. Flores, velas, frutas y la fotografía de un hombre fallecido: de un finado. (¿Los llamarán así, como nosotros, en el país hermanos?)